“El diañu quier ser un santu”
Casa pueblerina. Estamos en un piso alto. Al fondo hay un corredor por donde se ve el río Nalón, cerca de Pravia. Puertas laterales, una a cada lado. Es de noche y la luna riela en el río.
A la derecha hay una cómoda y sobre ella un quinqué que aparenta alumbrar la escena. A la izquierda hay un camastro chico con “xergón de fueya”, el que servirá de asiento. En la pared, sobre la derecha, estará colgada una escopeta antigua de pistón.
Al levantarse el telón están en escena “Sietevides” y Brígida, sentados sobre el camastro y forcejeando, pues él quiere besarla a ella.
BRIGI ¡Ay, Sietevides, nó, nó….. ! ¿Besarte?…. ¡Qué atrocidad!
SIETE ¡Unu non más!
BRIGI ¡Nó, ninguno; no me empieces a tentar…! Yo soy una noya bona y si así calmo tu afán dándote el beso que pides, caigo en pecado mortal….
SIETE¿Non me lu das? (se hace enojado) ¡Pues non xuego!
BRIGI ¿Te enojaste mi galán…?
SIETE ¿Dásmi un besu, sí o nón?
BRIGI Si, amor, te lo voy a dar. Te daré uno “de tranca”
SIETE ¿Eso que yé?
(Brígida coloca un dedo sobre los labios para evitar que al besarla le lleguen a la boca).
BRIGI Besa ya…..
SIETE Allarga más el focicu….
(Brígida alarga “el focicu” y “sietevides” le quita la mano rápidamente y la besa en la boca)
¡Toma!….
BRIGI ¡Válgame San Blas,
San Apapucio y San Xudas,
que es un santo catalán…!
¡Pero qué sabroso besas…!
¡Sietevides , quiero más…!
SIETE Pos yo non. Esi fociciu solu sirve pa fozar; tien más babes que un llimiagu” (Cómicamente suplicante)
¡Dame otro… !
SIETE ¡Non, xamás, que puede venos la xente (señalando maliciosamente al público) y non tarda en llegar Xuan.
BRIGI ¡Ese Juan es un demonio como tú….. !
SIETE Non, munchu más. Ye un mozacu quimerista que de todu ye capáz. Cuando saca una navaya acabada de afilar, delguno se i pon delantre y munchu menos detrás, pos igual fai un furacu a un cura que a un sacristán.
BRIGI ¿Y aquí estaremos seguros?
SIETE Inés, bien cuidada está….
BRIGI ¿Y yo non peligraré? ¡Soy niña…!
SIETE (AP) ¡Qué atrocidad! Puedes dormite tranquila; naide te despertará, que en Asturies, los pelleyos al gatu se suelen dar.
BRIGI ¡Picarón! No sé qué dices… (Sietevides se levanta y le dice a su vez) Ven al corredor; verás…
(Corriendo cómicamente a ver). A ver… a ver qué me enseñas. (Asomándose a la ventana) ¡Un río…! ¡Qué hermoso está!
SIETE Esti ye el ríu Nalón que hasta San Esteban va.
BRIGI ¿Y en San Esteban qué hace?
SIETE Pues allí métese al mar.
BRIGI Tú eres igual que ese río, porque te metiste ya al mar de mi corazón…….
SIETE Pos non me quiero afogar. (Se oye toser adentro)
BRIGI ¡Silencio! Inés de fijo acaba de despertar….
SIETE Sí, ya está tuse que tuse.
BRIGI De fijo con la humedad ya le salió alguna angina de pecho….
SIETE ¡Terrible mal! Bueno, esperteyu, me voy.
BRIGI ¿Irte ya? ¡Qué atrocidad! Antes me das otro beso…..
SIETE ¡Eso non, ya pido paz…! (La vieja lo persigue y el grita hasta que logra salir por la puerta derecha) ¡Auxiliu, que me zurriagan! (Sale corriendo)
BRIGI ¿Huyes?… ¡Me las pagarás!
(Brígida da muestras de gran enojo cuando sale por la puerta de la izquierda Inés, con el mismo traje que vestía cuando se la llevó Juan).
INES ¡Qué pesadilla he tenido y qué dulce despertar…! (Fijándose en Brígida) ¡El ama del cura..!
BRIGI Sí; también el ama aquí está.
INES ¡Otra! ¿Pues que casa es esta?
BRIGI Es una casa de Juan…..
INES ¿De Juan de la LLosa….?
BRIGI Cierto.
INES ¿Y cómo aquí vine a dar?
BRIGI ¿No recuerdas?
INES ¡Nada, nada!
BRIGI El desmayo; es natural…
INES ¿Que yo me desmayé, maña…..?
BRIGI Nada de maña; es verdad.
INES ¿Cómo estuvo? ¡Cuenta, cuenta!
BRIGI (Exagerando enormemente la relación). ¡Fué horrible la tempestad. Fué cuestión de unos segundos; se despierta el huracán, se cubre el cielo de nubes, se cubre de bruma el mar y el curita se descubre para ponerse a rezar…. ¡La campana de la iglesia sola empieza a sollozar y entre los gritos del viento deja escuchar su ¡tán…. tán…! De pronto….. ¡Porrón, pón, pón! ¡Un trueno que suena allá, un rayo que cae con furia y destroza nuestro hogar…! ¡Se extremece todo el orbe, la tierra empieza a temblar y las nubes se desgajan dando el grito de: ¡Agua va!¡Qué horrible fué el cuadro aquel, no lo quiero ni plensar…. ! Se sale el río de cauce arrastrando sin piedad, granos, muebles y ganado y las aves de corral; y es tan grande el remolino que causa la tempestad, que hasta el bonete del cura por el río abajo va y el cura tras el bonete va gritando sin cesar…!
INES ¡Sigue, sigue!
BRIGI Voy, muchacha; no me dejas resollar…. De pronto aparece un hombre tan guapo como un Tarzán, y al verte en aquel peligro, como si fuera un titán entre sus brazos te toma y sin mirar hacia atrás se va camino adelante…..
INES ¿Y ese quién era?
BRIGI Tu Juan.
INES ¿Y yo estaba desmayada?
BRIGI Parecías un costal.
INES ¿Eso es cierto?
BRIGI Te lo juro. Yo siempre digo verdad.
INES ¿Y mi padre no se ha muerto?
BRIGI ¿Morirse tu padre? ¡Quiá….! Es un baturro tan terco que temo nos ha de hallar.
INES ¿Y mi Juan, dónde se encuentra? (se oye un “Ixuxú” cerca)
BRIGI Ahí viene gritando ya….
INES ¡Ay, Brígida, tengo miedo!
BRIGI ¿Miedo…? ¡Qué barbaridad! ¡Mira, esa puerta se abre!¡¡Aquí está ya!
INES ¿Quién?
BRIGI ¡Tu Juan! (Juan entra y tirando a un lado la montera va hacia Inés alargándole los brazos hasta que llega a abrazarla sin que ella proteste)
JUAN ¡Guapa Inesina, mió neña…!
Regreso a vete, bien míu,
desde el otru llau del ríu,
brincando de peña en peña!
¿Quién vive por ti penando?
¿Quién todu su amor te dió?
BRIGI (AP) ¡Qué bonito! ¡Hasta yo siento que me estoy casando!
JUAN ¡Vete, vieya derrengada, hasta que yo aquí te llame; paeces pega con fame o curía desplumada….. !
BRIGI (Amable y sin entender lo que le dijo Juan)
Ya me voy, sin tanto grito… (AP) ¡Qué hombre para un capricho! No entendí lo que me ha dicho, pero me sonó bonito..!
(Se va corriendo y soltando una carcajada entre dientes. Al llegar a la puerta se vuelve y le manda un beso a Juan. Este hace como que lo pesca al vuelo y acciona como si lo tirase al río. Luego toma a Inés de una mano y la conduce hacia el camastro que les servirá de asiento. A lo lejos se oye muy quedo el son de una gaita que toca algún aire asturiano y que será como música de fondo de la escena.)
JUAN Siéntate aquí, corazón,
que yo ya estoy entumidu;
si per baxu sientes ruidu
ye que estás en un xergón.
¡Ah! ¿Non ye ciertu, rapaza,
que el vientu de esti llugar
sirve pa hacer despertar
el amor cuando espigaza?
Y al sacudir la cachaza
y mirar pe la ventana
les flores de la quintana
cuando naz el nuevu día,
non ye verdá, oveya mía,
que te sientes asturiana?
Cuando ves el gallineru
onde tengo les gallines
que atoruxen les probines
mirando al gallu altaneru;
cuando ves salir del ñeru
una gallina galana
que muy tempranu se afana
en sacar los sus pitinos,
¿non ye ciertu, miós güeyinos,
que te sientes asturiana?
Cuando ves esi felechu
ximielgándose orgullosu
como rabu de raposu
que se siente satisfechu
frente al carbayu derechu
de la llaguna lejana,
y al oyir cantar la rana
un himnu a nuestros amores,
¿Ye ciertu, ramín de flores
que te sientes asturiana?
¿Y esa gaita que yo escuchu
que chilla de vez en vez
y que al chillar paez
un carru cargau de cuchu;
y esi chillar de serruchu
conque el glayu en la mañana
mientres que pica una ablana
lanza al aire satisfechu,
¿non fai entrar en tu pechu
ganes de ser asturiana….?
(Inés toma una postura trágica y dice emocionada)
INES ¡Sí, mi Juanín de la Llosa,
me convenciste, por Dios,
y vamos a ser los dos
la pareja más dichosa.
Y la verdad, yo discurro.
Y te lo digo con gana,
que al hacerme tú asturiana,
yo pienso hacerte baturro.
Nunca conocí el amor
y siempre lo tomé a broma
y ahora soy la paloma
que se rinde al cazador.
Disparaste muy certero
la flecha de la pasión
y al darme en el corazón, (Señalando al corazón)
él dice ansioso: ¡te quiero!
Serás para siempre mío,
pues yo en ser tuya consiento
y lo que a tu lado siento
no sé si es calor o frío.
Quizá por mi ligereza
tal escalofrío es,
porque me tiemblan los pies
y me suda la cabeza.
¡Tú me robaste la calma!
¡Si amor se llama el sufrir,
quiero a tu lado vivir
y ser tuya en cuerpo y alma!
¡Y a Dios pido con fe rica,
que en el cielo juntas ponga
la Virgen de Covadonga
y a mi linda Pilarica……
(Le da un abrazo tan fuerte y con tal entusiasmo, que casi lo ahoga, y hasta el xergón se extremece de miedo. Al fin Juan recobra su actitud tenoriesca, al mismo tiempo que el resuello, y exclama entusiasmado).
JUAN ¡Rapacina enamorada;
yo ya perdí la cabeza
por tus labios de cereza
y tu olor a pumarada…..!
¡Non sé si ye el mesmu diañu
el que tú metiste en mí,
pos xuro que siento aquí (Señala el corazón).
un algo que me fai dañu!
Mió corazón taba muertu
y de repente lu encuentro
como si realmente dentro
tuviera un esculibiertu.
Y eso ye que estoy penando,
pos siendo, aunque non soy vieyu,
que ya mi falta el resuellu
y que me estoy afogando.
¡Mas, soy feliz, porque al fin,
ya nos queremos los dos… !
INES ¡Pues claro que sí… ¡Ridiós! (Tras esta exclamación propia de un hombre, se tapa un instante la boca como avergonzada; pero en seguida reacciona y abraza de nuevo a Juan con entusiasmo. En ese momento aparece por la derecha “Sietevides”).
SIETE ¡Oye, Xuan!
JUAN (Molesto) ¿Qué quiés, pollín?
SIETE Llegó Luis….
JUAN ¿Y qué traza i viste?
SIETE Trae mal humor, pues tien el probe un color que paez papel de estraza.
INES ¿Mi padre no viene?
JUAN ¡Calma!
INES Es que verle yo quisiera.
JUAN Veráslu si no hay quimera y non mi rompen el alma. Quiero que esti non te encuentre; pasa pa dientro, mió dueña….. (Inés obedece y hace mutis despidiéndose con entusiasmo)
INES ¡Adiós, mi Juan!
JUAN ¡Adiós, neña! (Al hacer mutis Inés le tira un beso a Juan. Este hace como que lo pesca en el aire y se lo guarda en el pecho. Inés cierra tras sí la puerta y Juan dice a “Sietevidas”)
Díi a esi llobu que entre (Se va “Sietevides”) Non sé lo que a pasar vaya. Ye bravu esi presumiu y aquí traigo mío navaya. (Juan saca una navaja del bolsillo y la guarda en la faja. Aparece “Sietevides” seguido de Luis, el que trae un garrote de esos que usan los andaluces y que son exagerados.)
SIETE Ya tá aquí el … “Matasiete”
JUAN Yes tú, nín… ?
LUIS ¡Basta de guasa! ¿Tú mandas en esta casa?
JUAN Yo mando, y me alegro el vete. Si traes fame y quies comer, tengo tocín con panchón….
LUIS ¡Yo quiero tu corazón…. !
JUAN Eso non va a poder ser. Mió corazón tá empeñau pues ya tienlo una nenina que espera la probitina en esti cuartu de al llau.
LUIS ¿Quién ez ella….?
JUAN Yo non sé; tú que siempre estás alerta, hay un furacu en la puerta y puedes mirar quien ye…..
(Luis simula mirar por un agujero que hay en la puerta y exclama sorprendido).
LUIS ¡Ez la zobrina der cura…!
JUAN Ye la mesma. A ver, ¿quién gana?
LUIS ¿Y dónde dejazte a mi Ana que era la mujer maz pura….? ¿No es juzto que te reclame?
JUAN Puede …. pero yo ti digo que non la truxe conmigo; si quies, puedes registrame.
LUIS ¡Ez que eztoy dezezperao; lo que pazó fué terrible…! ¡Mi Ana ya eztá inzervible!
JUAN ¡Si yo non ti la he estropiau!
LUIS ¡Basta ya! Juro por Dioz que por haberme engañao, en ezte mundo arraztrao ya no cabemoz loz doz..!
JUAN Nin que fueras tú de Muries que a todu vecín dan guerra; llárgate ya pa tu tierra y déxame a mí en Asturies!!
LUIS Me voy con la fe perdía por un amor traicionero; pero antez de ezto, primero pienzo llevarme tu vía…. !
JUAN Eso non ye tan sencillu, mocín, y decite quieru: mió vida non ye un moqueru que se lleve un en bolsillu. Les dos apuestes galanes y ya non gorgutes nada o ti doy una morrada que voy sacati les mueles.
LUIS (Sacando una navaja de grandes dimensiones que al abrirla suena como carraca). ¡Pué vamoz a vé zi e cierto, que nada me azuzta a mí, y a uno de loz dó, de aquí lo tienen que zacá muerto! (Entra rápido “Sietevides” y desde la puerta dice asustado)
SIETE ¡Oye, Xuan; ahí tá el otru que también quier dati caza!
JUAN ¿El padre de la rapaza?
SIETE Sí; vien montau en un potru. ¿Qué i digo?
JUAN ¿Vien de quimera?
SIETE Trae su palu de laurel.
JUAN Pos fáilu pasar a él y al potru déxalu fuera. (A Luis para que lo deje solo)
Ya oyiste, otru hablador; si tú yes de los valientes, guarda esi escarbadientes y aguarda en el corredor.
(Señala el corredor del fondo)
LUIS ¿No querráz comerme el trigo? Tú de todo erez capáz……
JUAN ¿Yes bobu o fáiste, rapáz? ¡Espérame allí, te digo…! (Lo empuja hasta el fondo y lo mete en el corredor, cerrando la vidriera que separa éste de la habitación. En seguida, Juan se arregla la ropa para recibir dignamente a don Gonzalo, cuando se oye la voz de éste afuera)
GON (Gritando desde afuera) ¡Hoy hago dos disparates… ! ¿Dónde se encuentra ese ateo? (Juan se arrodilla para recibirlo y dice mientras entra)
JUAN ¡Aquí estoy!
GONZA ¡Pero que veo…! ¿De rodillas?
JUAN Y a tus pates.
GONZA ¡Te humillas por tu pecado! ¡Eres un vil y un traidor!
JUAN Vieyu, escucha por favor…..
GONZA ¡No me ruegues, desgraciado! Este papel hallé yo, que es una carta indecente escrita en papel corriente!
JUAN Pos tres perres me costó.
GONZA Bien caro te lo han cobrado; pero vamos a otro asunto. Entrégame a Inés al punto, y así como estás postrado te arreo sobre el “porrón” tal garrotazo, mañico, que el más grande pedacico va a parecer un botón……
JUAN ¡Gonzalu, non me impacientes!
GONZA ¡Te he de matar con mi mano! ¿Lo oyes, burro asturiano…?
JUAN ¡Por favor, non me calientes! Con Asturies non te metas, porque aunque toy agachau vas a salir mal parau……..
GONZA Esos ya son cuchufletas.
JUAN Ciertu que soy asturianu, por eso el valor non mercu; en cambiu tú yes tan tercu como un gochu teverganu. Vieyu, dami a la to fía; si algo ti debo… verá cómo ti lo pagaré….
GONZA ¡En Aragón no se fía!
JUAN ¡Non me quites tal consuelu! Si non mi fáis esi dañu, te xuro que antes de un añu de fijo te faigo agüelu. ¡Y ya verás que nietucu…! Te va a parecer un osu; un rapacín muy garbosu, macizu de carne y tucu. Roxu por parte de madre, por su agüelu, mal geñudu, por so agüela, cachetudu y valiente por so padre. Seré esposu de primera; sabré doblar el cogote pa que “haiga” caldu en el pote y tocín en la panera. Ya nunca usaré el cibiellu, y aunque esté lexos de aquí pienso trabayar pa ti, porque al cabu ya tás vieyu.
GONZA ¡Eso, cobardía, es; juegas primero tu vida, te la robas y en seguida vienes a lamer mis pies!
JUAN Entra, Gonzalu, en razón y cuidiau non me provoques; lo de llamber non lo toques, porque yo non soy llambión.
GONZA Tú lames, según discurro, los pies del que te ha vencido, mas no serás su marido; ¡la quiero para un baturro!
JUAN (Indignado, pero de rodillas) ¡Vieyu, yo ya estoy furiosu y gafu como escurpión, y como tengo razón y nunca fui melindrosu, pa que calmes ya tu afán, con el corazón ya rotu te diré que tu merlotu ya ye esposa de esti Xuan!
(Luis, que salió unos momentos antes de su escondite, lanza una carcajada de triunfo al ver que tiene ayudante para la venganza, contra Xuan)
LUIS ¿Y ezte ez el hombre valiente?
GONZA ¿Quién eres?
LUIS Otro engañao a quien ezte le ha quitao una paloma inocente…..
(Juan, que se ha levantado al ver a Luis, se da cuenta de lo grave del caso y dice aparte moviendo la cabeza)
JUAN Veo que el fornu se arroxa….!
GONZA ¿Y esa paloma, quién era….?
LUIS ¡Era una mujer entera…!
JUAN ¿Cómo entera si ye coxa….?
LUIS Tú ya no intentez hablá, puez juro a fe de andalú por ezta bendita crú…..(Hace la cruz con los dedos y la besa) que aquí te pienzo matá, puez quien roba por detráz y de robar hace alarde, eze ez tan zolo un cobarde y no un hombre….!
JUNA ¡Estu más…. !
LUIS ¿Cuál Tomás? Véiz, ya ze humilla; culpa al otro de dezdoro, perro yo ya zoy un toro…..
JUAN (Parándose muy valiente frente a los dos) ¡Pos voy dati la puntilla…..! ¡Y ya me picó la misca, y como pienso dai fin, yo non soy como el pollín que contra el muriu se cosca. Pa reñil non soy prudente, pos siempre fuí atravesau y nunca me faigo a un llau si veo la muerte en frente.Y como toy decidiu, sólo vos digo una cosa y ye, que Xuan de la Llosa nunca el miedu ha conocíu. (Se acerca a la pared, descuelga la escopeta de pistón y le dice a Gonzalo)
¿Lo ves vieyu? Ya i llegó el fueu a la cincha al burru, y tú serás muy baturru, pero aquí el amu soy yo… ! (Le tira un tiro a Gonzalo y éste cae redondo)
GONZA ¡Ay de mí… ! (Cae)
LUIS ¡Gran cobardía!¡Matarlo con perdigonez como matan loz gorrionez allá por mi Andalucía….!
JUAN ¿Qué quiés, nin! Pusose fatu y cansomi la pacencia, y a tí, pa obrar en concencia, voy matate como a un xatu. (Luis da un salto atrás y saca la navaja de muelles)
JUAN ¿Ya sacasti el mondadientes?
LUIS ¡Ezta ez la que nunca falla!
JUAN Yo también traigo navaya como los homes valientes. (Saca su navaja de aquellas populares de “a perrona! Luis al verlo se burla de él fingiendo asustarse)
LUIS ¡Josú… ! ¡Toda mi prezona azuztó tu arma brillante… !
JUAN Pá matate ye bastante mio navaya de a perrona.
(Se atacan cómicamente. Tras un rato de lucha, Juan aprovecha un descuido de Luis y le da una puñalada en la espalda, hacia la región donde ésta pierde su nombre, y Luis cae muerto, gritando….)
LUIS ¡Er corazón me ha partío….. !
JUAN ¡Que naide de mi se fíe; el vivu ye el que se ríe y yo soy el que me río….
(Limpia la navaja sobre el cuerpo de Luis y luego le pone un pie encima como gladiador triunfante. De repente oye ruído y se alarma) ¡Siento ruídu..! (Se acerca al corredor y se oye la voz de “Sietevides” que le grita para que se salve como pueda)
SIETE ¡Tú, Xuanón!
JUAN ¿Qué quiés, hom?
SIETE Son los ceviles que lleguen con sus fuxiles….! (Juan se queda mirando tragicómicamente al cielo y dice:)
JUAN ¡Cielos, daime espiración!
(Transición como si de repente hubiera sido inspirado)
¡Qué suerte! ¡El ríu Nalon
que pasa cruciando el llanu!
¡Pos allá va un asturianu
que nada como un salmón…!
(Se arroja por el corrador al río, oyéndose el golpe del cuerpo al caer en el agua)
Telón rápido. Fin del Acto Segundo. Fragmento de
"El tenorio Asturiano". Angel Rabanal- Antonio Martínez Cuétara. Méjico 1944.-
|
Comentarios
Publicar un comentario